La ciudad

Las orígenes de la ciudad se pierden en las brumas del tiempo. Fundada por los Ligures, una población opositora acérrima de la conquista de Roma, durante la época romana fue un importante puerto militar. El mar ha marcado de cerca la historia de esta ciudad, que se desarrolló en torno a una bahía natural, entre las colinas al norte y el profundo azul del Mediterráneo al sur.

Durante la Edad Media, Génova se convierte en "la Superba", el casco antiguo llegó a la altura de su desarrollo, incluido entre el Mandraccio y la Linterna. La ciudad se enriquece con las iglesias llenas de tesoros - como Santa Maria di Castello, San Donato, SS. Cosme y Damián -, su magnífica catedral de San Lorenzo, en el que se conserva la "Sacro Catino", - el plato de la ultima cena - según muchos el "Santo Grial" de la tradición cruzada. Palacios y torres parecen tocar el cielo. El puerto de Génova es el punto de partida ideal para las cruzadas y aún hoy la “Commenda” de San Giovanni di Pré es un impresionante testimonio. Génova es ‘Ianua’, la puerta de entrada al Mediterráneo, el punto de tránsito entre el norte de Europa, África, Oriente Medio y el Mar Negro.

Con la fundación del Banco de San Jorge, la ciudad se convierte en la capital de las altas finanzas. Los banqueros genoveses prestan grandes sumas de dinero para todas las monarquías de Europa, la ciudad se transforma en una metrópolis opulenta, donde el lujo y la riqueza atraecen artistas y viajeros de todo el mundo. Rubens describe los palacios de la ciudad como "más dignos de la corte de un príncipe que de un caballero particular." Van Dick inmortaliza los genoveses con magníficos retratos, los artistas de la escuela barroca genovesa decoran los palacios suntuosos dei Rolli.

Las guerras napoleónicas y la anexión de la República de Génova al Reino de Piamonte-Cerdeña giren la ciudad en el primer puerto de Italia. El centro histórico sale de sus antiguas fronteras, la ciudad se expande arriba de la colina de Castelletto con amplias avenidas, plazas, palacios ricamente decorados.

Hoy Génova es una de las ciudades más bellas de Italia, Patrimonio de la Humanidad, y proponemos descubrirla juntos.